lunes, 5 de julio de 2010


Hace unos dias apareció muerto Salomón, el hamster mascota de Ignacio.

No sabemos de que murió, descartamos que sea de viejo porque tenía un año y medio, no se veia mal y los cuidados que recibía eran, hasta donde etendemos, los adecuados. Independientemente de la causa por la cual haya muerto ello no disminuye el impacto que produjo en Ignacio el encontrar a Salomón muerto, su desolación era muy grande y por supuesto que a todos nos dio pena por el "bicho" y por Ignacio, Salomón era parte de la familia y a pesar que no era muy sociable igual nos entretenía a todos con sus payasadas y como daba a entender que tenía hambre al sentarse en el pote de su comida.

Es triste la muerte de una mascota, a Ignacio le dijimos muchas veces que era algo que podía suceder, pero obviamente mientras no sucede los niños no entienden de lo que uno les habló. Son lecciones que nos va dando la vida, de todo hay que aprender porque en algún momento de nuestras vidas nos tocará enterrar a un ser querido y entonces el impacto es mucho más fuerte.

Salomón descansa en paz en el patio de la casa, allí volverá a la vida en forma de flores.